Cárcel Abstracta

Dime tú que entiendes por 'preso', si es una palabra tan grande. Físicamente es estar encerrado entre cuatro paredes, lo que aplica la ley que es abstracta, te encierra, te condena. Y tú... que eres real, tangible, me puedes privar de libertad, me atas a un sentimiento del cual padezco y me cuesta 'expresar'. ¿Captas la diferencia?, entiendes que puedo caminar como de costumbre, pero mis caudales están detenidos, mi mar no ruge, ni la luna es capaz de acelerar aquellas olas. Todo por ser reo de tu persona, se que no fue tu intención apresarme, que fui yo el que cometió el delito de robar mi propio corazón y entregarme a ti tras cometer mi delito. Hoy cumplo la condena y quizá cuánto dure, yo no lo sé aún y creo que tu tampoco.
A mi celda siempre llega un rayo de sol al amanecer, aquel me da energía, de seguir y luchar, mantener este sentimiento sabiendo que es dañino, sabiendo que una vez que salga de estas rejas habré deseado tener cadena perpetua. Es que tu justicia es muy liberal, me ata y desata todos los días, me liberas cuando llego, me atas cuando me voy. Tu solo das el tiempo, en mi cuarto soy mi propia visita, tu eres la guardia que controla el tiempo y mis acciones. Tu decides y deshaces, como quién abre y cierra una puerta; no me liberes por favor. El aire libre me sofoca, pero el tuyo, pero el tuyo mi vida, tu aire me acaricia; es algo que va más allá de lo normal.
¿Eres capaz de arriesgarte?, ¿dejar de pensar si haces bien o haces mal? ¿de hacerte preguntas? ¿Lanzarte al abismo sabiendo que la caída es dura?. Yo creo que vale la pena, que más da si yo ya estoy preso gracias a ti. Es una experiencia única, ven, te invito, toma mi mano y acompáñame en este cuarto solitario que solo abandono cuando voy a visitarte, a ese lugar que es la otra cárcel.